Hace un mes madrecita mía te fuiste
en silencio al encuentro de Dios acudiste
a ser parte de un hermoso jardín celestial y eterno
no hay mayor dolor que la falta de tu amor materno
Mi alma de hijo te extraña, veo al cielo y siento la brisa
mi mente no logra otro objetivo sino de recordar tu sonrisa,
siento que me acaricias y recuerdo tu tierna mirada
sin embargo tu ausencia hace que llore por tu partida.
Mi voz se quebranta, la mirada la tengo perdida
mi ojos se llenan de lágrimas por la despedida
y me pregunto si fue suficiente mi cariño y amor de hijo
no encuentro respuesta a este vacío y busco un cobijo.
Viejita linda, reverente estoy en tu tumba
de rodillas rezo a Dios porque mi alma se derrumba
le ruego para que encuentre consuelo a este sentimiento
Que por tu partida al edén eterno no haya resentimiento
Eres mi Ángel que con una sonrisa iluminas mi senda
a cada instante tu recuerdo hace que yo entienda
Que tu amor de madre es eterno y ya no sienta tristeza
Y que ya no agache la mirada y busque en el cielo tu grandeza
Madrecita mía me reconforta el recuerdo de tu firmeza
Le pido a Dios que te bendiga y te proteja con su manto
Como tú me protegías toda tu vida con encanto
Esperando para reunirnos eternamente sin tristeza
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